Camino


Camino


 

Llevo en mi equipaje

una maleta llena de desengaños,

-voy andando caminos de antes

ya sabéis, con mis dedos ensangrentados-,

y miro a los lados mil flores de pétalos rotos:

el futuro se hace frente de bruma y de lodo.
 

...Llevo en mi maleta de trapo

un pasado lleno de agua negra

y en mi pupila mis ojos se ciegan

dibujando rosas de frío mármol.

 
Grito un: ¡ no!

que estalla en los cielos

deshaciéndose entre la noche y su voz,

y en el ayer que se me clava dentro...

tan adentro...

 
Y se pierde entre mi olvido

y renace de entre la sombra del recuerdo.

         -Nunca debí haberme quedado en el desatino

de esperar el crepúsculo de tus sueños ciegos -.
 

Voy andando mi camino

a medio paso entre lo que quise

         y lo que quiero,

perdido entre la luz que mis ojos hiere

y lo que pinté con colores de fríos versos.

 
No quiero que me veas roto y herido;

ya sabes, tan sólo queda el orgullo herido

y el recuerdo de aquel frágil y tierno niño

que tembló inocente a la sombra de tu destino.

 
Miro lejos, más allá del horizonte rojizo

que me asombra cada una de las mañanas

pero no veo ninguna estrella  a las que miraba

cada una de las noches en las que me miraron..

 
Voy andando mis  caminos:

paso a paso, el alma sangrando,

-         los ojos en el suelo clavados

y el corazón de muerte malherido-,

sin que una sonrisa me llame en forma de sonrisa

a un nuevo amanecer que calme mi melancolía.

 

 

Tarde marchita


Tarde marchita


 

Y se me echó la tarde encima

con todas sus horas, clavándome sus agujas

con las que se marca los tiempos para morir

en los surtidores de la sangre que vomitan

rabia de saberse vivos, de querer vivir.

 

Ni un solo segundo faltó en la diana de la hora

en la que el roto corazón se muda y se calla.

Ni un segundo. Todo tiempo, toda esperanza

se tornó viento que se evapora entre tu falda

buscando caminos perdidos entre las sombras.

 

Y se me echó la tarde encima

con todas sus verdades escondidas tras mis sueños.

El atardecer estaba lejos de tus brazos y de tus besos

y mis versos languidecían en su vacío inmenso

cuando la tarde los sumió en palabras marchitas.

 

Se me murió la tarde entre mi tristeza

y el cansancio con el que buscaba el eco de tu sombra.

Los pasos sonaron a cuerpo caído en tinieblas

perdida la voz de tus labios y el beso de tu boca.

Me faltaban tus manos, tu ternura,  tu sonrisa.

 

Digo amor ahora



Digo amor ahora


 

 

Digo palabra,

y digo paz, amor, ansiedad desnuda

del otro y de cuanto oculta

en un corazón con vocación de alma.

 

Digo palabra, y verso,

y digo te quiero y te deseo y anhelo

cada segundo en que me falta

el calor necesario de tu triste mirada.

 

Digo poesía,

y digo te quiero con un corazón de niño

que se encoge en una noche vacía y fría

sin el calor con el que me regala tu sonrisa.

 

Digo verso y palabra,

y digo te quiero en estas horas calladas,

en estos vacíos instantes en los que aguardo

el sueño de enredarme entre tus brazos.

 

 

Besos en el aire




Besos en el aire


 

Se me llevó el viento,

ese mismo viento que roza nuestros labios

y enciende la esperanza de los besos.

 

Un día, aún recuerdo,

mezclé un te quiero con mi aliento

y lo entregué al futuro incierto.

 

Y se me llevó el viento,

ese viento que me trajo, aún lo recuerdo,

un: ¿No me entiendes?... No te entiendo.

 

Luego murió de pena nuestro viento,

agonizaron los días, lloró el silencio

y nació la melancolía de mis versos.

 


Luz de la noche






Luz de la noche


 

 

 

La noche, mi amiga,

la dueña de las sombras y el ensueño,

del espejismo del mundo y de su ocaso.

 

La noche, mi enemiga,

alumbrando la ficción de los sueños

y las realidades del inevitable fracaso.

 

Mis noches, siempre mis amigas,

donde mis ojos dibujan en la sombra lo incierto

y el día desmaya en un teatro absurdamente cotidiano

 

Amanece la noche, se derrumba el día.
 
La luz se enciende, se apagan las pesadillas



Rumor




 
Rumor

 

Anochece...

Todo habla. El silencio en el silencio duerme.

...Todo me habla de ti.

 

            Los versos van sumando sangre de palabras.

            Palabras.. sólo palabras...

             

Si pudiera

romper esta cárcel de fantasmas de sombras...

...Todo me ata a ti.

 

            Las luces juegan buscando paraísos perdidos.

            Muere el tiempo. Agoniza el olvido.

 

Anochece.

Mis manos aferradas al ultimo instante que se me muere

... Todo me habla de ti.

 

 

 

 

Bebé




Bebé


 

Pasaste junto a mí

con esa mirada perdida entre luces y reflejos,

todo asombro, todo siempre nuevo,

todo siempre por revivir.

 

Y en un instante, tan sólo en un breve instante

tu mirada encontró la mía,

tu sonrisa me recordó otras perdidas sonrisas,

y... ya sabéis...me enamoré.

 

Tus manitas luchaban por atrapar no sé qué

en el vacío de los ojos ajenos,

y el aire se llenó de pronto de invisibles luceros

con los que siempre sueño y siempre soñaré.

 

Pasaste junto a mí.

Y al poco sólo quedó el roce de una sonrisa,

un dulce reflejo del espejo de otra sonrisa,

y claro.... ya sabéis.... de ti me enamoré.

 

 

 

No me dejes




No me dejes

 

No me dejes…

Si me dejaras la ciudad se rompería en cristales negros

que agrietarían el color de la esperanza.

                …Los sueños traen de la mano el miedo

                de las pesadillas de las noches que te arañan….

 Pero está tu mano que encadena mi mano

a tus ojos y a la luz de tu dulce mirada;

y todo ya da igual: el cielo juega con los blancos

y los azules rompen el miedo … y calla.

No me dejes…

Si me dejaras mi mundo se rompería cada mañana

y el aire asesinaría cada una de mis palabras.

                … ¿Y qué haría yo sin mis palabras

                palabras de amor, del amor palabras ?…

Sombra



Sombra


 

Era una sombra.

Un perfil de vidrio inestable

que forman los vientos sin color y sin destino.

Pero... ¡ Parecía tan hermosa!

Dormía en los recodos

que forman las lágrimas del infantil deseo

en  días de nubes de plomizo acero

cuando la vida inhala niños olvidados.

Era apenas un grito, un  delirio,

un poema de versos prematuramente suicidados,

una palabra muda en un vacío libro.

que busca con ansiedad sólo su recuerdo.

Leo ese libro y despierto su absurdo destino

en esos recodos que forman los relojes

de un tiempo intuitivamente enloquecido

cuando los ojos se distraen en hojas muertas

de flores de papel herido por el fuego.

Era una sombra. Apenas una sombra.

Murió a  la luz de un poema radicalmente herido

por el dolor de una sangre amotinada,
 
en el vacío, por el vacío de  una sombra


Tenue




Tenue


 

La tarde se hace tenue.

Una mezcla de melancolía y calma

juegan al escondite en mi alma.

Todo es fugaz, nada duele.

 

De vez en cuando algún recuerdo

el mar de olas muertas remueve,

pero lentamente, con pereza, el viento

entre otros recuerdos lo disuelve.

 

La tarde se endulza de las mañanas

en las que las pupilas sueñan y duermen.

Todo es paz. Nada duele.

La esperanza juega con la esperanza.

Instante de amor




Instante de amor

 

Y ahora, en este instante, dime:

¿Acaso la noche con mi nombre no te estremece

cuando tu piel busca caricias que ya no  entiende?
 

            … Los besos son interrogantes entregados al vacío

            del  sudor cuando acarician placeres prohibidos..
 

Las sábanas juegan a hacer construcciones en el aire

escondiendo cuerpos rotos y caricias interminables

cuando el amor se siente de puro amor inalcanzable.
 

Pero ahora dime:

ahora, cuando el tiempo se muere entre tus brazos

y sólo queda tu nombre pegado a fuego entre mis labios,

ahora que apasionados se incendian nuestros versos.

 
Dime, mi amor ,en este ahora dime,

cuando todo se diluye en un dulce y ardiente silencio:

¿Pudo soñar la felicidad con el amor de tantos “te quiero”?
 
 

Partida




Partida


 

Abandono mi puerto al alba.

No sé donde me lleva mi destartalada barca,

ni siquiera si isla o ira en abismo encallada.

Pero debo partir. El horizonte me llama.

            La tormenta agrietaba mis velas y las olas ahogaban

            el timón retorcido de la esperanza en la esperanza.

...Yo sólo necesitaba la brisa de una palabra...

¿Pero cómo esperar del sueño de la nada?

 

El aire frío teje pensamientos en mi terraza

con la complicidad de mis estrellas reencarnadas.

Viernes frío en la noche. Resbalan las lágrimas

sobre la indiferencia del gris azar de la mañana.

            Abandono mi puerto, Será al alba.

            Nada me retiene. Todo ya está en calma.

... Yo sólo necesitaba una caricia que calmara

el turbio sabor de mis rotas madrugadas...

 

Abandono tu puerto en esta noche callada.

Nada echo de menos, nadie llorará mañana.

Tu nombre se evaporará de la nostalgia:

¿Cómo puede llorar lagrimas la nada?

            Soñé sueños que otros sueños soñaban.

            Durmió el sueño. La noche trajo la mañana.

Te dejo un adiós, unos versos, algunas miradas.

Me voy vacío. Sólo bolsillos llenos de nada.

 

 

Amar a distancia





Amar a  distancia

 

Amar a distancia,

con corazones heridos por una soledad

que sólo la noche entiende entre sus lágrimas.

Amar, acaso soñar

con un beso, una caricia, una palabra

que rompa el aullido del silencio interminable

de cada minuto fatalmente  insobornable.

Amar a distancia.

Amar hasta romper en aire el alma

con la infantil esperanza

de que un trocito de ese sueño en una mañana

resbale dulce en el corazón de quien amas.